miércoles, 24 de octubre de 2007

Los desposeídos




Actualmente estoy leyendo un clásico de Ciencia-Ficción (a la que soy muy aficionado) de Ursula K Le Guin: The Dispossessed.

Este libro consituye una de las más famosas utopías anarquistas modernas, si bien no tiene nada que ver con el ancap puesto que no apoya la propiedad privada. Es una historia sobre dos planetas que giran uno en torno al otro: en uno de ellos, Urras, el sistema vigente es el capitalismo exacerbado y en el otro, Anarres, existe una anarquía pura y dura.

Los habitantes de Anarres son antiguos habitantes de Urras que se "fugaron" del planeta para fundar colonias lejos de los capitalistas. En Anarres, para incentivar el trabajo, utilizan una especie de "reconociemiento/rechazo social" que la verdad no sé si funcionaría (siempre hay gente con poca vergüenza que se quiere aprovechar de cualquier sistema). El protagonista es un físico anarquista (Shevek) de Anarres que viaje a Urras para dar con la gran teoría unificadora.

El problema es que Urras es inmensamente rico y Anarres es un planeta yermo.

Uno de los párrafos del líbro me ha gustado en especial porque plantea preguntas sobre la relación de los seres humanos con sus propiedades:

Algo sombrío giró en la mente de Shevek, oscureciéndolo todo. Tenía la boca seca. Vació la copa que el camarero acababa de llenarle.

—No sé —dijo. Sentía la lengua casi paralizada—. No. No es maravilloso. Es un mundo feo. No se parece a éste. Anarres es todo polvo y colinas secas. Todo estéril, todo seco. Y la gente no es hermosa. Tienen manos y pies grandes, como yo y como este camarero. Pero no grandes vientres. Se ensucian mucho, y se bañan juntos, nadie aquí lo hace. Las ciudades son muy pequeñas e insignificantes, son tristes. No hay palacios. La vida es opaca, y el trabajo duro. Uno nunca puede tener lo que quiere, y ni siquiera lo que necesita, porque no hay para todos. Ustedes los urrasti tienen suficiente para todos. Aire suficiente, lluvia suficiente, pastos, océanos, alimentos, música, edificios, fábricas, máquinas, libros, ropas, historia. Ustedes son ricos, nosotros pobres. Ustedes tienen, nosotros no tenemos. Todo es hermoso aquí. Menos las caras. En Anarres nada es hermoso, nada excepto las caras. Las otras caras, los hombres y las mujeres. Nosotros no tenemos nada más. Aquí uno ve las joyas, allí uno ve los ojos. Y en los ojos ve el esplendor, el esplendor del espíritu humano. Porque nuestros hombres y mujeres son libres. Y ustedes los poseedores son poseídos. Viven todos en una cárcel. Cada uno a solas, solitario, con el montón de lo que posee. Viven en una cárcel y mueren en una cárcel. Eso veo en los ojos de ustedes... el muro, ¡el muro!

Todos lo estaban mirando.

Shevek oía el sonido de su propia voz todavía vibrando en el silencio, le escocían las orejas. La oscuridad, la tiniebla, volvió a moverse dentro de él.

¿Acaso no son más felices los ascetas o los monjes? Quizás en vez de buscar riqueza para todos (cosa que parece muy difícil) deberíamos buscar riqueza espiritual (que además es más barata) o desapego al mundo material.

¿Alguien se apunta?


8 comentarios:

dijo...

Solo,

Avísame cuando leas "The probability broach"

Totalmente a favor de los bienes inmateriales y morales. Como todos los ciudadanos del primer mundo, con las necesidades vitales ya cubiertas, nos preocupamos por bienes menos mundanos...
Lo cual está muy bien. Siempre y cuando sea una decisión libre y voluntaria.
El problema es que la mayoría de las veces a lo largo de la historia que un líder lo propone, quiere decir para todos y a la fuerza.
Me encanta Anarres porque es a lo que llegaría el sindicalismo/socialismo si se hiciese de forma voluntaria... si se pudiese hacer sin expropiar, robar y matar. Si se pudiese hacer sólo convenciendo...

dijo...

Por supuesto siguen siendo pobres (y no sólo pq lo sea el planeta en recursos naturales) ya que el socialismo no sólo tiene el problema de los incentivos y de la naturaleza humana, sino tb el problema del cálculo económico, que ni todos los MULTIVACS del mundo pueden resolver.

http://en.wikipedia.org/wiki/Economic_calculation_problem

Han Solo dijo...

El enlace que has puesto no se puede ver correctamente Gallatin.

Para verlo haced click aquí.

dijo...

Por cierto Urras, más que capitalista es mercantilista/imperialista/corporativista. Al menos si por capitalista entendemos lo que entendía Marx (que inventó el término).
De hecho la novela es de los años '60 y las analogías con la Guerra Fría son evidentes. En Urras hay 2 grandes potencias, una "Capitalista" y otra comunista.

La autora marca el contraste entre estos dos sistemas autoritarios y el anarco-sindicalismo de Anarres

Han Solo dijo...

La verdad es que sí...

Otra cosa que me gustó del libro y que es analogía de la Guerra Fría es que los dos bandos de Urras mandaban armas/ayuda/dinero/soldados a la guerra para "ayudar" al vecino que estaba en medio de las dos facciones, "porque hacer la guerra en casa o en casa del enemigo no merece la pena, no es de países civilizados. Nosotros no queremos conquistar territorios sino demostrar la supremacía de nuestra potencia". La situación es tan parecida al Afganistan de antes...

Jack Sparrow dijo...

Muy buen artículo Han. Es un tema que aunque se ha debatido mucho no llega lo suficiente a la población, la cual se encuentra bombardeada continuamente con camapañas de marketing agresivas consumistas.
Yo creo que el hecho de desear lo que no tenemos, valorar los bienes materiales, la posición social,...es algo "humano" y por tanto no podemos luchar contra ello y engañarnos con utopías socialistas o comunistas. De hecho en los regímenes comunistas conocidos al final los que mandan acaban enriqueciéndose mucho más que los líderes capitalistas.
Para mí la clave es valorar las cosas que uno tiene en cada momento y aprender a mirar al presente. Es posible que con un barco de 20 metros puedas pasartelo mejor que con uno de 10, pero en realidad el de 10 está de puta madre y es más que de sobra. La insatisfacción permanente es muy efectiva para triunfar en el mundo capitalista y tener mas éxito que nadie, pero tiene el problema que conlleva una infelicidad permanente, siempre mirando al futuro, pensando en lo que podrías tener o mejorar.
Por tanto, no deberíamos quitarle el valor a las cosas materiales que lo tienen (un buen paseo en barco es clave). Lo que hay que hacer es usar esas cosas material a tu favor y no en tu contra, disfrutando al maximo y no siendo un esclavo...

Han Solo dijo...

Amigo Jack, La verdad es que iba a decirte que "que hay de esos pobres que no tienen barco", pero...

¿Somos piratas no?

¿Qué sería de nosostros sin un barco (aunque sea de 10 metros) y una canción?

Anónimo dijo...

Sencillamente un texto brillante, e interesantísimo para el debate.